Seguidores

jueves, 30 de agosto de 2012

No poder sentir tus labios...

¿Esto es real? ¿Qué puedes hacer para demostrarlo? ¿Cómo podemos saber que nuestra vida no es una mentira? ¿Y si todo lo que conocemos no es más que un juego entre dioses caprichosos? ¿Qué nos espera después de esta vida? ¿El eterno silencio? ¿Dejar de sentir? ¿Ni siquiera dolor?

No poder sentir tus labios, tu piel contra la mía es lo que me está volviendo loca.

Como me gustaría creer en un cielo donde algun día encontrarnos para estar juntos para siempre.

Para poder sentir que el mundo jamás se acabará para nosotros, ni nuestro amor.

 Pero es tan difícil creer en algo tan perfecto y maravilloso; es tan difícil creer en un para siempre.




miércoles, 22 de agosto de 2012

Noches.

Noches, noches oscuras, en las que necesitas pensar, en las que necesitas soledad.
Noches en las que lo único que puedes escuchar es tu propia respiración. Noches en las que necesitas silencio absoluto, ordenar tu cabeza; quizá buscar el valor para hablarle a esa personita especial, quizá lo único que necesitas es romper a llorar sin ningun reparo.
Quizá la única solución es que dejes todo atrás; pero cómo hacerlo. Cómo olvidarse de todo.
Es demasiado difícil borrar toda una vida, por muy corta que sea.
Quizá todas estas palabras solo sean pensamientos de una chiflada.
Quizá no.
Quizá lo único que realmente se necesita de noche es dormir y no pensar.
Simplemente soñar.




jueves, 16 de agosto de 2012

Tu, el mejor pecado.

A cada segundo que pasa me cuesta más poder olvidarte. Me robaste las ganas de vivir, me arrancaste los besos sin piedad, rozaste mi cuerpo sin remilgos y yo, tonta de mí, a cada centímetro me enamoré más locamente.
Sin saber que esto para ti, solo era un simple juego, sin saber que todo esto para ti no era nada más que un pasatiempo; como un niño con su nuevo muñeco.
Pero después de todo, tus labios son lo mejor de todos los pecados.



miércoles, 8 de agosto de 2012

Eterna dulzura la tuya.

¿Conocéis esa sensación de sonrisa permanente cuando veis su foto? ¿O cuándo lo veis caminar y se os da un vuelco al estómago? ¿O esa sensación de pura electricidad cuando esa personita especial os coge de la mano? Esa es mi sensación preferida. Electrizante pero llena de ternura; es como un suspiro, pero que te cala hondo en el corazón. Es como una flecha directa a tu cabeza que te sumerge en un sueño, pero tan real...
A veces, incluso marea. Otras te lleva a volar a los lugares más recónditos del mundo y otras, incluso te lleva al borde del mayor placer. Pero lo más importante, es que esa sensación es única, esa sensación solo te la produce ese pequeño roce, y por eso es tan especial.


martes, 7 de agosto de 2012

Nadie es perfecto

Lo siento si no soy perfecta, tampoco lo intento. No quiero ser esa chica de piernas largas y caderas sinuosas. No quiero tener el cabello más largo y rubio que has visto en tu vida, tampoco los ojos claros. No quiero tener la piel pálida como las chicas de película. No, yo no quiero ser perfecta, tampoco lo intento.
Yo quiero ser esa chica que con sus payasadas te saca una sonrisa, quiero que te guste enredar tus dedos en mis cabellos castaños y que al mirarme a los ojos avellana mires la luna y mucho más allá; quiero que en ellos mires el imperfecto amor que te ofrezco; pero uno de verdad. En este amor encontrarás peleas y seguramente muchas decepciones; pero te lo aseguro, cada vez que estés a mi lado tendrás un momento inolvidable y lleno de ternura. Porque yo no soy perfecta, ni mi amor, ni nosotros; pero será la mejor de todas las imperfecciones, de eso estoy perfectamente segura.




Curiosa



Esa extraña costumbre que tiene el ser humano de regalar sonrisas a los desconocidos, mientras descarga el mal humor con quién más ama.




lunes, 6 de agosto de 2012

Necesitandote

Porque sabes que fuiste, eres y serás, ese niñito de ojos traviesos que me enamoraron. 

Ganas de todo, menos de ti.


Hoy voy a ser fuerte, sin necesidad de que me digas que está bien. No hace falta tu disciplina para ser feliz, créeme.
Rómpeme las ataduras, por favor, me ahogas.
Recuerda que ya no soy una niña pequeña, que nunca más voy a picar en tus estúpidos juegos; que nunca más voy a volver a caer en esas redes que me sujetaban tan fuerte.